Pages

sábado, 29 de enero de 2011

De viaje en viaje


Me he ausentado un tantito del blog, pues he estado de viaje por aquí y por allá con mis padres, visitando su ciudad natal, un pequeño puerto en el norte del país, paseando por el malecón, recorriendo el muelle viejo y casi abandonado, vale decir que me cagué de miedo de caminar por allí, mirando fijamente cada tabla que pisaba y escuchando cada rechinada, a ver si una de esas no era la señal que estaba a punto de caerme directo al mar. Disfruté mucho de la playa (aunque no me bañé, mucha “guata” y mucha más vergüenza aún), en realidad lo que más disfruté de la playa fue ganarme con los brasileros y australianos practicando surf, aunque no todos estaban tan buenos como uno quisiera jajaja. El propósito original del viaje, sin embargo, no era que mis ojos se deleiten con el esculpido cuerpo de uno que otro surfista, en realidad vinimos a celebrar una misa de conmemoración cumplido un año del fallecimiento de mi abuelo por parte materna, pocas veces asisto a misa alguna, por la que esta fue una ocasión especial. Algo que definitivamente no disfruté, fue tener que aguantarme todas esas charlas de recuerdos, añoranzas e historias en blanco y negro endulzadas con más de un vaso de cualquier tipo de licor conocido, odio encontrarme en medio de estas pláticas de “viejos” xD, todos mis tíos, tías y otros allegados atormentándome con sus pláticas (entre ellos) y yo aburrido a más no poder, con una cara de poto ahorrándome las palabras para evitar vociferar algo como: “Quiero largarme de este lugar”, mi sufrimiento era tal, que tenía que escapar de dichas escenas, bajo cualquier excusa como ir a comprar el pan y no volver hasta la noche.

Acabo de llegar hace unas horas, de otro viaje de regreso a Lima, mis padres me estaban sofocando (en realidad solo mi padre, mi madre es una santa), por lo que en un súbito arranque de locura y desenfreno, les comenté que me regresaba en el primer carro que saliera del terminal, y así lo hice, tenía que volver, necesitaba salir, ir a ver a los amigos, pero entonces una vez ya asentado, me encuentro aquí y necesito ver a alguien, me doy cuenta que mi círculo de amigos está muy limitado, la gran mayoría ( de los pocos que tengo) está de viaje, a otros no los puedo ver o es mejor no verlos por “x” o “y” motivos y entonces ¿con quién me quedo?, mí círculo de conocidos puede ser muy grande, lo cual no es necesariamente mérito propio, pero se da, en cambio mi círculo de amigos, de aquellos a los que pudiera ir a molestar a sus casas, sacarlos de improvisto para dar una vuelta al parque, ir al cine, a la playa, a la disco o a tomar al bar un rato, son pocos, muy pocos, los cuento con una mano y si me pongo a pensar si realmente he tenido un “best friend forever” al mismo estilo de las películas, con quien uno ha compartido absolutamente todo y con quien uno siempre puede y podrá contar, la única persona con tanto impacto en mi vida como para haberlo considerado como mi “mejor amigo” ha sido mi ovejo, (mi ex).

He vuelto aquí por algo, así que no me voy a aburrir y quedarme en casa sólo, sentado frente a la computadora todo el día como una ostra esperando que algo interesante venga a mí o que alguien me saque a la fuerza de esta prisión autoinducida y me libere del aburrimiento, el bochorno del día y todo lo que me esté sofocando o me vaya a sofocar. Si vine aquí precisamente para evitar esto último y para divertirme un rato, pues lo voy a hacer de alguna u otra manera, por ahora estoy planeando mi futuro viaje (sí ,otro, este verano me la daré de viajero), en esta oportunidad pienso irme a Arequipa, a ver cómo me salen las cosas y sobre todo a ver si me hago conocidos para disfrutar mejor el viaje, la idea de viajar sólo de por sí no es muy divertida, ojalá y se pueda dar.

La canción de hoy es Voy en un coche de Cristina y Los Subterráneos.

sábado, 22 de enero de 2011

Toda acción produce una reacción


Vivimos de tomar decisiones, de escoger con quién salir y con quien no, de optar por una carrera para estudiar, de preferir ciertas juntas y otras no, de escoger que ropa usar, de ir, venir, jugar, tocar, besar, leer,  salir, viajar, únicamente si queremos hacerlo, son raras las situaciones de la vida en las que podemos aseverar que hemos sido presionados a tomar ciertas decisiones o que alguien más las tomó por nosotros. Ciertamente no es mi caso, en toda mi vida nunca he sido forzado ni siquiera a hacer las tareas, todo lo que he hecho ha sido siempre porque quise hacerlo, para bien o para mal, siempre he sido ciento por ciento partícipe de mis decisiones.

No hay decisión que no nos afecte, toda acción genera una reacción igual y contraria, no podemos evitarlo, solo nos queda tomar la responsabilidad debida, aceptar las culpas, saber manejarlas y con el tiempo aprender a perdonarse a uno mismo si algún daño ha sido ocasionado aun cuando no haya existido intención alguna. He ahí el problema, si bien es sencillo cargar con la culpa y vivir torturándose a uno mismo con el recuerdo de lo que las acciones propias dieron lugar, es tremendamente difícil perdonarse a uno mismo, toma tiempo, toma esfuerzo, no es algo que se logre de un día para otro, para ello primero hay que aceptar que todo ya está hecho y no se puede volver atrás, y aunque existiese máquina capaz de retroceder el tiempo y permitirnos cambiar las cosas, no tendría sentido hacerlo, somos el resultado de cada una de nuestras decisiones en el pasado y en el futuro seremos el resultado de cada una de las decisiones que tomemos en el presente. No hay nada que cambiar en nuestras vidas o dejaríamos de ser quienes somos ahora.

Cada una de las decisiones que nos han llevado al lugar en el que nos encontramos actualmente son el resultado de nuestros pensamientos, de nuestra ideología de vida, tomamos las decisiones basados en las mismas, es por esto que pase lo que pase, debemos respaldarlas, por supuesto tenemos que admitir la posibilidad de errar, pero si no lo hiciéramos nunca aprenderíamos lección alguna. Entonces cómo saber que está bien y qué está mal, cómo saber cuándo hicimos daño y cuándo no. Si nuestras decisiones por más dicha y júbilo que traigan a nuestras vidas traen consigo desdicha y tristeza a alguien más, pues hay que soportarlo, no se puede complacer a todos, hay que seguir adelante, pensar mejor las cosas a partir de ahora, pero seguir adelante.

Y eso es lo que intento ahora seguir adelante, disfrutando de lo que haya disfrutar incluidos los buenos recuerdos, aceptando mis culpas e intentando redimir el daño que sin querer causé a alguien más. Me encuentro mucho más tranquilo ahora, estoy aprendiendo a sobrellevar todo, la distancia me ayuda, aunque no tanto como quisiera y es que todo lleva tiempo y felizmente tiempo me sobra.

La canción de hoy es Warning Sign de Coldplay.

>

miércoles, 19 de enero de 2011

Otro día ordinario


Hoy no ha sido más que eso, como es usual en estos días de verano me levanté de la cama alrededor del mediodía, con un fuerte y recurrente dolor de cabeza y la sensación de bochorno ya instalada, tomé una ducha fría como pocas veces lo hago, no soporto el agua fría ni en verano, pero en esta ocasión el calor ya estaba insoportable, bajé a almorzar y a ser increpado por mi padre acerca de la hora a la que me levanto, la chica que trabaja en mi casa estuvo tocando el timbre toda la mañana esperando que le abriese la puerta, mientras yo seguía en lo más profundo de mi sueño, felizmente le encargaron la llave a una vecina y pudo entrar. Hoy almorcé “cabrito”, (entiéndase esta palabra no como un eufemismo gay xD, sino como un plato propio de la gastronomía del norte peruano). Terminado el almuerzo, me dejé seducir por mi único vicio (se podría decir que es el único que tengo, al menos por ahora), los juegos de computadora,  soy un completo adicto a uno en particular (Dota) y es que no encuentro nada mejor qué hacer en estos días, no tengo ganas de salir, o tal vez sí las tenga, pero no hay nadie con quien hacerlo y no me gusta salir sólo en ocasiones como estas, en las que extraño tanto la compañía de por lo menos un compañero de clases. Peor aún sería salir a conocer gente aquí, y mi pregunta es: en primer lugar eso cómo se hace, es que nunca aprendí, la gente solía venir a mí y no yo a ellos.

Repito algo que ya he dicho antes, uno sale de la ciudad y al regresar siente que todo ha cambiado, tal vez las calles no han mejorado mucho a cómo las dejé años atrás, y el perfil urbano de la ciudad siga siendo tan descuidado como siempre, pero lo que sí cambió fue la gente, mis conocidos, mis ex compañeros, mis viejos, olvidados y soterrados amigos ya no están, se perdieron, los perdí. Todavía tengo que permanecer unos cuantos días más aquí, el doctor dice que mi recuperación marcha bien, pero que de todas maneras no estoy en la capacidad de hacer mucho ejercicio ni nada parecido hasta que terminen de cicatrizar las heridas y baje la inflamación. Tendré que volver de todas maneras dentro de un mes para mi control, pero no me quiero quedarme aquí hasta entonces.

No hice nada productivo en este día y si la rutina no me ha terminado de absorber aún, pues ya estoy sintiendo sus efectos y seguro que muy pronto terminará su trabajo, todos estos días han sido ordinarios, aburridos, muy hogareños tal vez; me doy cuenta que no los disfruto del todo, siento que no son malos, pero son muy neutrales, no me inspiran nada. Por ahora tomo esta etapa como un autoexilio, supuestamente para repensar bien todas las cosas, pero pensar no me ayuda, cómo es que uno sigue adelante, cómo es que uno pasa la página, cómo dejo de pensar en él, cómo dejo de sentirme culpable, cómo puedo hacer algo, lo que sea, sin recordar cómo lo hacía con él, es que hacíamos todo junto, ahora apenas hablamos, nos hemos vuelto fríos el uno con el otro, no me acostumbro a la idea, no sé seguir adelante, no sé si él sabe, no sé si deseo que él sí lo sepa, mucho de egoísmo en esta frase, creo que quisiera que él esté sufriendo como yo, para quitarme algo de culpa y dejar se seguir sintiéndome como el “único”. La pregunta más difícil ahora es cómo me perdono a mí mismo, solo así podré seguir adelante.

Por lo menos hoy dejé de escuchar canciones sufridas, luego de percatarme que llevaba ya demasiadas horas jugando y antes que otro dolor de cabeza me invada, decidí parar y escuchar un poco de música animada de la mano de Gaga, (me encanta esa mujer, ya sé que es muy cliché xD) y a bailar un poco, ya dije en una entrada anterior que me encanta y de hecho he participado en un par de coreografías en la universidad tanto de Bad Romance como de Telephone. La música y bailar ayudan mucho, aunque ahora al final del día, vuelva un tantito el desánimo y sienta que todo ha sido por gusto, sin embargo es un día más, ni bueno, ni malo, solo muy neutral para mi gusto, muy apagado, muy ordinario y no lo soporto, pero tendré que seguir haciéndolo, porque no sé bien cómo las cosas podrían cambiar.

P.D. Este post es una chanfainita (entiéndase como un arroz con mango) hablo de una y otra cosa, no sé focalizar bien mi tema, pero al menos me nace escribir algo, bueno, malo o pésimo, pero en algo me libera.

La canción de hoy será una más animosa, para que no se me escapan las pocas ganas que he ganado, valga la redundancia, y como para seguir saturando el mercado lo último de Britney Spears: Hold It Against Me (no sé ni por qué la escucho u.u)

lunes, 17 de enero de 2011

¿Qué hacer con mi vida?


¿Y tú de qué lado estás?, me siento muy cómodo siendo espectador, alguna vez intenté ser el artista, pero las cosas no funcionaron, definitivamente meter mis manos allí no es lo mío, felizmente me di cuenta al poco tiempo, me cayó un baldazo de agua helada, pero me regresó a mi realidad, lo mío con el arte va desde la otra ribera, la lejana.

Una de las decisiones más difíciles, si es que no la más difícil, en la vida de todo adolescente que está a punto de terminar o ya terminó la escuela es elegir la carrera, profesión, oficio, trabajo o sencillamente decidir qué hacer con su vida, de qué va a vivir y cómo va a hacerlo. Terminé la escuela a fines de 2007 con una idea en la cabeza, estudiar medicina, lo que no tenía muy en claro era si medicina humana o veterinaria, desde pequeño sentí atracción por ambos campos, crecí en el seno de una familia con una tradición que me encaminaba hacia salud humana y supongo que por momentos me convencía más esta rama, aun cuando desde pequeño siempre sentí fascinación por los animales y una envidia por el trabajo a campo abierto con los mismos. Andaba perdido y no terminaba de elegir alguna de las dos. El verano de 2008 había iniciado ya y yo seguía indeciso, peor aún, con muchísimo miedo, tenía pensado postular a una universidad nacional y ahorrarles a mis padres el tremendo costo que involucraría cualquiera de las dos carreras si estudiase en una universidad particular, pero la educación buena y totalmente gratuita, es la más dificultosa de alcanzar, pues por una vacante hay que pelear con en ocasiones una exorbitante cantidad de chicos con tantas o más ganas que uno mismo. No me sentía lo suficientemente preparado, me tiré al abandono el verano entero y en una de las decisiones más estúpidas de mi vida, decidí girar el timón súbitamente y dar una vuelta de 360° en busca de una tercera carrera alternativa.

Tenía pocos días para hacerlo, los exámenes de la mayoría de universidades en este país se dan en los meses de febrero y marzo y si en esta oportunidad me quería decidir por postular a cualquier otra carrera “más sencilla” en una universidad privada donde el examen de ingreso sería menos exigente, pues la decisión tenía que ser tomada ya. Vamos chico piensa, qué otra cosa te gusta, piensa, de manera repentina vino a mi mente, mi “gusto” por lo artístico, para ese entonces yo visitaba asiduamente una página de arquitectura y disfrutaba mucho de apreciar las fotos, bosquejos, diseños, lo urbano en general, esta forma tan extraña de arte no abstracto, de inmediato y sin pensar en las consecuencias de tremenda elección, me dije eso es, debe ser “sencillo” y si bien no sé dibujar (y odio hacerlo), supongo que todo se aprende, ya adaptaré mi mente al estilo creativo requerido para desempeñarme en dicho campo.

Indescriptiblemente logré convencer a mis padres, e incluso cuando sé perfectamente que fue una pésima elección, agradezco el apoyo brindado frente a las impulsivas decisiones que tomé en dicho año. Ingresé, pero desde allí todo fue en picada, 2008 no fue un buen año para mí, de hecho fue el peor, me encontraba solo, forzándome a estudiar algo que desde el primer momento supuse no era para mí, si a eso les sumo los combates con mi alter ego producto de las dudas casi confirmadas sobre mi sexualidad acompañadas de una fuerte negación y represión a la que esta vieja versión mía me sometía con tal de no aceptar lo evidente (ya hablaré de eso en otro post).

Pasó lo que tenía que pasar, odiaba la carrera, sentí que si seguía adelante con esta farsa no haría más que arruinarme más la vida y ser un profesional mediocre más del montón. Dejé la carrera al poco tiempo y si bien recuperarme de la depresión que vino con esto y mucho más me costó mucho tiempo, dicho tiempo me ayudó a repensar todo por completo y finalmente poder llegar a contestar la pregunta, a qué me quiero dedicar de ahora en adelante, sin importar lo que cueste y qué tan difícil o no sea ingresar, tanteé mucho y terminé de tomar la decisión que debía haber tomado antes, estudiar medicina veterinaria, más que nada en este mundo me gustan los animales y mucho más aquellos que estén en el estado más salvaje posible. Hoy llevo ya dos años en esta maravillosa carrera y puedo decir algo tengo la suerte de que mi carrera es mi hobby, no me quejo en lo absoluto, al arte lo miro de lejitos y así estoy bien = )

La canción de hoy es A Mistake de Fiona Apple.

sábado, 15 de enero de 2011

Proyectos aún no truncados de verano


Llevo cerca de mes y medio de vacaciones y nada ha resultado del modo en que lo había planeado. Debe ser una pésima costumbre mía, ésta la de sobreproyectarme al futuro, tenía muchos planes para este verano, algunos más concretos que otros e incluso los más disparatados incluían a una persona muy especial en ellos. Hoy mi relación (a todo nivel) con dicha persona se ha desbaratado por completo y tengo la sensación de que yo y mis planes nos quedamos en el aire, pero no he de permanecer mucho tiempo aquí, aún me quedan un poco más de dos meses lejos de la universidad y el estrés habitual que allí me acompañará, TENGO QUE disfrutar este tiempo, reestructurar mis planes, dejar de planificar todo milimétricamente y lanzarme de lleno a volver reales todas mis ilusas ideas, TENGO QUE.

Me leo y digo qué fácil que es proponerse cualquier cosa y qué difícil que es TAN SOLO comenzar a hacerlas, pero intento ser optimista y quiero pensar que podré aprovechar estos días y me evitaré seguir desperdiciandolos sentado frente al computador dieciséis horas al día, estoy considerando ocho de sueño.

Tenía en mente realizar un viaje, en realidad estoy de viaje, en casa de mis padres, pero eso no cuenta (el fin del viaje era diversión, no aburrimiento), mi idea original involucraba un viaje con mis compañeros de la universidad, iríamos en una especie de curso-excursión a practicar con ganado en altura y en trópico, sería divertido y a la vez aprendería muchísimo de mi carrera, la ilusión se deshizo con la operación que tuve hace pocos días, aunque quisiera ir no podría, ya que estoy prohibido de hacer esfuerzo alguno durante por lo menos una semana y mis amigos partirán ya el próximo lunes, todo sucede por alguna razón y si me quedé atrapado aquí será porque algo mejor o sencillamente distinto vendrá en su lugar. Mantengo la idea de mi viaje, pero en esta oportunidad lo haré sólo, será como un viaje de autodescubrimiento, me preocupa el dinero, pero al parecer ya obtuve la atención de mis padres, ahora solo falta que suelten las preciadas monedas y especialmente billetes, sustento de mi ansiado viaje, felizmente tengo mis propios ahorros y la cantidad que me falta por cubrir no es mucha.


Otro de mis proyectos era tomar clases de baile o de canto, no soy el mejor en ninguna de las actividades, dudo que mi voz esté a la altura de aunque sea una promedio y padezco de ciertos problemas de ritmo y gracia para el baile, sin embargo, disfruto haciéndolo, nada me reanima más que bailar, en momentos en los que me siento muy abatido, triste, cansado, reprimido, estresado o acongojado, pues reproduzco cualquier canción animosa, mi cuerpo empieza a moverse solo y al cabo de unos segundos me veo a mí mismo dando vueltas, haciendo uno que otro paso o simplemente saltando totalmente desquiciado y sin parar hasta escuchar la última onda sonora emitida por la canción, una vez más la operación arruinó mis planes, las clases a las que pensaba matricularme ya comenzaron, y con el viaje planeado no me quedará mucho tiempo para tomarlas, en todo caso de algo que sí puedo estar seguro es que con maestro o no, inscrito o no, aprendiendo o no, con ritmo o no, yo seguiré bailando y cantando, esos pequeños placeres de la vida, nunca los dejaría de lado, siempre hay formas, la práctica hace al maestro esperemos que sea bueno siendo autodidacta.

Finalmente para acabar con este resumen de mis proyectos de verano, tenía pensado, comenzar a ir al gimnasio, bueno en realidad tenía mucha vergüenza de hacerlo, así que pensaba hacer ejercicios en casa, estoy muy flaco, “tela”, como dirían por aquí y realmente necesito mejorar mi físico e ir sintiéndome poco a poco más a gusto con mi cuerpo. Hay un poco de problemas de baja autoestima involucrados en este deseo, y aunque la gente se empecine en decirme que no estoy "tan mal," pues igual me sigo sintiéndome menos, ¿menos qué? ..., no sé, pero menos. Ni bien termine la semana de reposo estricto, comenzaré de una buena vez con los ejercicios, por lo menos media hora al día, unos 5 días a la semana, me conozco, soy muy perezoso y dejado, por lo que me va a costar poder ceñirme a una rutina estricta, pero paso a paso lo iré haciendo, frente a la casa, hay un gimnasio, eso facilitará aún más las cosas, espero.

La canción de hoy es instrumental, de una de mis películas preferidas, todos tenemos algo de Amélie, antes que tener a “la mía”, prefiero ser la “de alguien más”, eso se lee raro, pero habrá quienes me entienden.
Esta es mi versión preferida La Valse d'Amélie" (Orchestral version), compuesta por Yann Tiersen.

miércoles, 12 de enero de 2011

Una cita en el quirófano


El doctor ordenó que hay que rasurarte me dice una de ellas, pero si las incisiones serán en el abdomen, es una cirugía laparoscópica no suprapúbica añado yo visiblemente alterado, eso fue lo que nos dejó encargado el doctor contestan ambas enfermeras casi al unísono, ahora échese en la cama y desvístase de inmediato (por lo visto no pierden el tiempo digo por dentro). Algo que nunca en mi vida yo mismo habría hecho, alguien más lo hizo por mí, lo único que puedo decir es que pica.

Luego de realizarme las preguntas y exámenes de rutina y una vez terminada la embarazosa rasurada, la enfermera me llevó a mi habitación, no sin antes rematar mi pudor con su pertinente comentario “vaya que eres peludo”. Lo primero que noté al ingresar fue el enorme cuadro de un crisantemo blanco, que me pareció le daba a este un aura muy positiva, extrañamente cálida y alegre. Lo admito me gustan las flores, aunque parezca algo patético y demasiado gay, ¡eso qué?, pero shhh!!! no se lo digan a nadie que quede entre nosotros, vale.

Entré cerca de las once de la mañana a la clínica, aunque la cirugía estaba programada para las dos de la tarde, una vez acomodado en la habitación, procedí a cambiarme, sí, con esas batas para cirugía a través de las cuales alguien más puede apreciar cómodamente todo tu trasero, puesto que no llevan broches por detrás, pero vamos ya qué vergüenza puede uno preservar en esos momentos. Me colocaron la vía venosa, por alguna razón mis venas eran un poco débiles y reventaban antes de que si quiera pudieran perforarlas, “felizmente” a la tercera fue la vencida, tenía que serlo, ya no quedaba espacio en mi brazo para más pinchadas.

Esperé pacientemente que llegue la hora pactada, mientras tanto aprovechaba para ver en la televisión algún documental animal, sí, también me gustan los documentales, algo aburrido y “nerdy” ¿no? Transcurrido el tiempo me llevaron a la sala prequirúrgica, donde fui prácticamente obligado a orinar en una “botella” (llámese papagayo o urinario masculino para términos médicos, no sé ustedes, pero yo escucho papagayo y la primera imagen mental que tengo no es precisamente de algo plástico). Lo logré con muchísimo esfuerzo y mucha más vergüenza aún, la enfermera terminó de vestirme con la vestimenta que me faltaba para entrar de una vez a la sala quirúrgica, los únicos recuerdos que tengo de dicho lugar son lo gélido del mismo, me sentí en un frigorífico y yo con ropa tan ligera y descubierta, la sala estaba llena de aparatos de nombres desconocidos, luces en todo lugar, instrumental y personal moviéndose de aquí para allá. Me pasaron a la cama y cual bestia salvaje que podría enloquecer y atacar a alguno de los doctores allí presentes, me sujetaron débilmente las manos con unos cintos verdes, me colocaron un aparato para medir mi ritmo cardiaco, de inmediato la máquina comenzó a dar las señales de que efectivamente estaba vivo (aleluya con el “corazón muerto, pero aún contrayéndose) y aunque por un segundo dejó de sonar, ello no significaba que moría súbitamente frente a mis propios ojos o que estaba sufriendo un paro antes de si quiera haber recibido la anestesia, es solo que me picaba el brazo y es difícil rascarse con las manos sujetadas, así que tuve que morderme disimuladamente y de casualidad moví uno de los aparatos, induciendo mi propia muerte artificial por un segundo.

No recuerdo ni si quiera en qué momento me anestesiaron, no recuerdo inyección alguna, ni la intubación, ni nada en absoluto, después del mencionado episodio anterior, pasé dos horas o quizás más tiempo, perdido en otra dimensión, incluso más allá de mis sueños, solo espero no se hayan aprovechado de mí en el momento más inerte de mi vida. Volví a despertar ya en mi habitación y recordé el consejo de mi madre: “una vez que despiertes no hables ni levantes la cabeza para nada”, así que tuve que retroceder unos cuantos años en mi humanidad y volver a comunicarme con señas y leves golpes a la pared o a la cama para indicar lo que necesitaba al menos por una hora, mientras los efectos de la anestesia se terminaban de esfumar, lo primero que hice fue revisarme el abdomen y localizar las cicatrices, una en el ombligo por donde entró el visor de la cámara y dos por debajo y a los costados del mismo por donde entraron los trócares, son las ventajas de la cirugía laparoscópica, pequeñas incisuras y un rápido tiempo de recuperación, ya al día siguiente de operado, estoy en casa, echado en mi cama, con poco dolor, sufrí para escribir esto completamente echado sin poder sentarme, pero ya terminé y me siento mejor = )

La canción de hoy será Better Version Of Me de Fiona Apple.

lunes, 10 de enero de 2011

Ausencias


Hace un año que escribí el presente "poema", digamos que la poesía no es mi fuerte, no sé bien cuál podría serlo en realidad, intento descubrirlo, poco a poco lo iré haciendo y supongo, con el tiempo iré mejorando.

En dicho momento traicioné la confianza de la persona a quien más quería (en realidad a quien más quiero), hoy he vuelto a hacerlo, he vuelto a herir sin querer, no he sabido esperar, según algunos, el momento indicado para decir la verdad, pero por qué hacerlo, el momento indicado es el que uno decida, no el que alguien más crea conveniente, no soy bueno mintiendo, ocultando cosas, no lo soporto por mucho, me envenena  con su ponzoña casi de inmediato y finalmente la verborrea me "forza" a decir la verdad, quiero pensar que a pesar de todo mi incapacidad para mentir es una cualidad valiosa.


Duele verte tan ausente,
duele sentirme tan ausente
todo duele hoy en día.

Quiero verte, sentirte y tocarte,
pero no me queda más que reprocharme
la razón de tu partida.

Yo partí primero
cuando la confianza fue perdida;
yo seguí el sendero
la razón de mi caída.

Duele vernos tan ausentes
duele verme al mediodía
con la congoja tan presente
en mi alma partida.

Solo espero que lo simple,
que lo burdo y sinsentido,
que los errores cometidos
con paciencia se arreglen.

Hoy me duele tu ausencia,
mas la respaldo y comprendo,
pues fue grande el tormento
que causé con mi insolencia.

"It's all right to make mistakes, you're only human. Inside everybody's hiding something, take time to catch your breathe and choose your moment."

La canción de hoy es Slide de Dido.

P.D. El post me quedó muy corto, pero a grandes razgos todo está allí.


sábado, 8 de enero de 2011

Extranjero en la tierra propia


Regresé a este puerto querido donde nací, hace mucho tiempo (desde que me fui a vivir a otra ciudad) que no me quedaba tantos días por aquí, usualmente solo venía para visitar a mis padres en días festivos y por problemas con mi horario de clases me tenía que regresar con las mismas luego de apenas un par de días. En esta oportunidad será diferente, me quedaré por mucho tiempo, un tanto obligado por la operación a la que tendré que someterme el martes y el reposo que deba de guardar luego. También obligado en cierto modo por mí mismo, para mantenerme alejado de Lima, de verdad que necesito el tiempo aquí, para recoger las piezas del jarrón roto que apenas puedo contener con mis dos manos, cuyas partes resquebrajadas una a una se van cayendo y será inevitable que finalmente todas terminen por hacerlo, necesito el tiempo para curar las heridas autoinfringidas , para desenredar los nudos que hay en mi cabeza con respecto a mis pensamientos y esencialmente a mis sentimientos, necesito entenderme, más que nada necesito perdonarme y perdonarse a uno mismo no es una tarea que se logre en poco tiempo, será mejor que lo haga lejos de los demás.

Todo es completamente distinto aquí, la gran mayoría de amigos que tenía ya dejaron hace mucho de serlo, esto en gran medida producto de mi capacidad de desinteresarme y volverme rápidamente indiferente con las personas, pasa que mis amigos duran solo ciertas temporadas y me cuesta renovarles el contrato para la próxima, sobre todo a la distancia, los contados a quien aún considero amigos míos o por lo menos ex compañeros de colegio muy cercanos ya no están aquí, partieron cada uno buscando su propio rumbo por ciudades muy distintas, aquí ya no me quedan amigos, todo es nuevo, apenas si reconozco las calles, pero ya no tengo historias en ellas, ya no.

Los días son extremadamente monótonos, acostarme cerca de las dos o tres de la mañana, despertarme a las diez, con un irritante dolor de cabeza y con el tremendo calor que no me ayuda a aliviarlo, bañarme para mitigar por lo menos la sensación de bochorno del día, desayunar como se debe (primera vez en mucho tiempo que lo hago y eso porque alguien más lo prepara por mí), dar vueltas en la casa, ver la tele un rato, encender la computadora entrar al chat, al facebook o a leer blogs, jugar algún videojuego otro rato más, terminar aburriéndome, dar unas cuantas vueltas más en la casa, jugar con mis perros, salir a caminar solo por la tarde, volver para la cena, ver alguna película o serie y así seguir perdiendo el tiempo hasta que el sueño comience a colonizar mi cuerpo. Una vida no muy divertida que digamos, vamos, en realidad es una vida bastante aburrida, pero por ahora quiero disfrutar de todo este tiempo sin hacer nada, a pesar de todo me merecía ya unas vacaciones sin andar estudiando nada, (en las pasadas apenas tuve tiempo para descansar, pues me metí a avanzar algunos cursos en la universidad).

Conforme pasen los días sé que me aburriré más y más y me costará encontrar algo divertido que hacer o alguien con quien salir, los días se volverán pesados, demasiado nostálgicos quizás, algo deprimentes también, pero me retendré a mí mismo aquí o al menos evitaré volver. Tengo en mente realizar un viaje, ya no solo lejos de los amigos, compañeros, la universidad, sino también de mis padres. Necesito ese viaje, para entrar verdaderamente en contacto conmigo mismo, tengo algunos ahorros y lo más probable es que ni bien me recupere del todo, salga en busca de esa travesía, a dónde, aún no lo sé.

La canción de hoy es Just Like Honey de The Jesus & Mary Chain, que aparece en el soundtrack de una de mis películas preferidas Lost In Translation.

jueves, 6 de enero de 2011

Promesa cumplida sin haber hecho nada


Eran casi las 8 de la mañana de un 31 de diciembre cualquiera, apenas he abierto los ojos y escucho un sonido estridente, era el timbre, me pregunto quién podrá ser, había olvidado que mi hermano mayor me comentó que vendría a visitarnos en la mañana, abro la puerta, era él, luego de la plática de rutina, el clásico “hola, qué tal, cómo te va, qué dices”, me pide que lo acompañe a traer a la bebe, acepto gustoso, hace mucho que no la veo pienso, ojalá aún me recuerde.

Subimos al carro, rumbo a su casa, por dentro yo me preguntaba: -qué rara la ruta que está tomando, siento que estamos dando vueltas y más vueltas, creo que este no será un paseo cualquiera.

-Lex , ¿no hay nada que quieras contarnos?
-Hmmm, no sé bien a qué te refieres.
-Pues si estás teniendo problemas, si te están molestando, si estás deprimido, si has conocido a alguien, ¿nada?
-Tal vez sí, siempre tengo algo que quisiera contar, pero siento que nunca es el momento adecuado (me faltan los cojones digo por dentro).
-Lo digo porque desde hace un par de semanas que nosotros LO sabemos.
Me congelo por unos instantes, por alguna razón creo saber ya de LO que habla, aunque espero que  sea lo que estoy pensando. No logro atinar a responder nada y me quedo callado por unos minutos.
-No hace falta buscar mucho, en internet está todo.
-…
-Creo que ya sabes de lo que te estoy hablando, ¿verdad?
-Creo que sí, digo titubeando.
-¿Hace cuánto que lo sabes ya?
-4 años.
-¿No crees que puedas estar confundido?
-No, desde hace 4 años que no, uno siempre lo sabe, no necesita probar, experimentar para darse cuenta, pero el proceso de autoaceptación si demora más tiempo, demasiado en algunos.
-¿Y cuándo pensabas decírnoslo?
-Me prometí que no pasaría de este año y ya ves sin querer queriendo se cumplió mi promesa. (la verdad es que soy un mariquita en todas las de la ley y cojones me faltan y quizás siempre lo harán, digo por dentro).
-¿Todo está bien?, no tiene problemas en la universidad, afuera o con alguien, lo digo porque leyendo el BLOG pareciera que no andas muy bien.
-(Con que era el blog digo por dentro, yo andaba pensando que habían encontrado alguno de mis perfiles en otras páginas, creo que lo hubiera preferido u.u, allí no hay nada, bueno casi nada, este blog en tan poco tiempo tiene mucho ya) Yo estoy bien ahora, andaba con alguien por buen tiempo y ahora ya no, pero estoy tranquilo (mentira).
-Bueno me alegra escuchar eso, que bueno que sepas bien ya qué es lo que quieres y te hayas decidido a llevar la vida que deseas sin importar el qué dirán.
-Solo quiero que sepas que todos te apoyamos, sabes que nuestros padres nos han criado para ser libres, tolerantes y responsables con nuestros actos, sabes que cuentas con nosotros y si alguna vez quieres hablarnos de algo, presentarnos a alguien o pedirnos lo que sea no dudes en hacerlo.
-Gracias, de verdad muchas gracias por esto, digo con una voz casi cortada y los ojos aguados, mientras en el reproductor suena Politik de Coldplay.
(Yayyyy!!!! Grito por dentro de felicidad) Se esboza una leve sonrisa por fuera, no quiero ponerme eufórico ni nada, pero fui infinitamente feliz en ese momento, me sentía ligero, cargaba un peso menos sobre mis hombros.

Siempre he sentido que mi familia me apoyaría si lo supieran, pero nunca tuve el valor de animarme a contarle nada a mi familia, mis padres aún no lo saben al parecer, mi hermano me dijo que solo ellos lo sabían por ahora y que confían en que encuentre el momento adecuado para terminar de quitarme el peso que me queda y hablar con mis padres al respecto.

No sé muy bien qué haré con el blog, por ahora solo le he cambiado la dirección, el nombre no puesto que mi paupérrimo sentido de la creatividad no da para un mejor nombre. No quiero AUTOCENSURARME, ese es el problema, no quiero comenzar escribiendo algo (de lo que quería escribir) y a mitad de camino frenar de golpe y mandar el escrito al tacho o retocar todo que terminaría siendo lo mismo, sea cual fuese el motivo. Sé muy bien que hay ciertas cosas que no deben comentarse por el blog, eso sí lo tengo claro desde hace mucho, pero lo que no quiero es escribir con miedo a que me lean, quienes “SUPUESTAMENTE” no deberían. No sé bien qué hacer.

La canción de hoy es Politik - Coldplay. My eyes are already open.